¿Cuál es su plato favorito?

Me encanta hacer mi dim sum de jabalí. Se trata de pequeñas albóndigas rellenas de cuellos y hombros de jabalí. Es un plato estupendo y pone la caza al alcance de todos.

¿Cuál es su ingrediente favorito para trabajar?

Me encantan los ingredientes como las hierbas silvestres y de jardín y las cosas que cultivamos y forrajeamos nosotros mismos. Mi madre tiene un enorme huerto casero y siempre estamos buscando hierbas y setas y, por ejemplo, nueces inmaduras para nuestras "nueces negras" en el bosque. Esto lleva mi conexión con la naturaleza al plato.

¿Quién es uno de sus principales proveedores o productores?

El Lindenbrunnenhof de Forchheim am Kaiserstuhl nos suministra viejos y nuevos tipos de verduras como tomates, zanahorias, acelgas, ensaladas y patatas de colores. La calidad y la variedad son siempre inmejorables.

¿Cuál es el mayor reto al que se ha enfrentado en su carrera culinaria?

Cuando trabajaba en el restaurante Luce, mi hermana Kirstin me llamó para decirme que habían llevado a nuestro padre al hospital. Me pidió que volviera a casa. Nunca olvidaré la gran y compasiva reacción de Mario Corti, el director de cocina de Ellmau.    Me dirigí a él y le expliqué: "Terminaré el servicio de la tarde y luego me subiré al coche, pero no sé si volveré pronto". Su reacción fue genial: "Así es exactamente como lo haremos. Vete a casa, mira cómo va y me llamas dentro de tres días".   Mi padre, gracias a Dios, se ha recuperado, pero tenía claro que ahora era el momento de que mi hermana y yo nos hiciéramos cargo del restaurante familiar. De repente tuve que dirigir un equipo de cocina que no conocía y cocinar un menú que no había escrito. Los primeros meses fueron duros.

¿Qué tendencia gastronómica le entusiasma más?

En el restaurante Spielweg no seguimos todas las tendencias, sino que hacemos lo nuestro y lo hacemos con la mayor coherencia posible.

Si sólo pudiera comer un plato el resto de su vida, ¿cuál sería?

Es difícil de decir. Soy un gran fan de la pasta. Me encanta la cocina italiana en todas sus variantes. Y también la Flammekueche o el simple pan con mantequilla. Y no hay que olvidar las tres cosas tradicionales de Baden: la ensalada de salchichas, el Brägele y el Bibiliskäs, y por supuesto el sushi.

¿Qué es lo que tienen que ver o hacer sus invitados en la zona?

Los huéspedes deberían seguir la ruta de senderismo que hay detrás del Spielweg sobre el Gießhübel y hacia el Schauinsland. Es un paisaje de ensueño. A continuación, visiten la acogedora ciudad de Staufen y vean la actual exposición de arte en el Museo de la Fundación Beyeler.

Gracias, Viktoria.